Llegó la primavera, una época ideal para priorizar los cuidados de nuestras plantas. Es el momento perfecto donde nuestras amigas verdes empiezan a crecer de manera constante durante todo el año. Durante este periodo podemos procurar que nuestras plantas alcancen su máximo esplendor y al mismo tiempo convertir nuestro hogar en un ambiente de bienestar.
Los cuidados de nuestras plantas no son cosa fácil, ya que depende de muchos factores para garantizar el máximo crecimiento en ellas. Entre los diferentes tipos de factores que podemos considerar son el tipo de planta, la luz, el riego, la temperatura, entre otros. Todos son puntos que debemos tener en cuenta, si éstos no son ejercidos de manera correcta, nuestras plantas podrían quedarse sin vida y posteriormente marchitarse.
Es por ello que traemos a tu disposición varios de los consejos más importantes a considerar. Esto con el fin de que nuestras plantas luzcan un aspecto saludable y sobre todo si queremos que nuestras amigas verdes duren por mucho más tiempo:
Elección:
Debemos considerar que existen diversas especies de plantas, unas necesitan ambientes y cuidados más específicos, mientras que otras sobreviven con una atención más mínima.
Al momento de adquirir una planta, es muy importante informarse sobre qué condiciones ambientales necesita. Esto con el fin de valorar si el ambiente en el que se instalará es el apropiado.
Iluminación requerida:
Recordemos que no todas las plantas necesitan la misma cantidad de luz. Sin embargo, todas tienen una cosa en común, que si no tienen luz suficiente; inmediatamente lo manifiestan. Es por esto, que es necesario estar en constante observación de cómo reacciona la planta en el espacio en la que fue colocada. Ya que, en caso de no recibir la luz necesaria, tendremos que cambiarla de lugar.
Temperatura:
Debemos de considerar que la temperatura adecuada es una condición de suma importancia para las plantas. Los cambios bruscos a los que se someten por condiciones externas, muchas veces las perjudican. Es por ello tomar en cuenta que tipo de temperatura le va mejor a mi planta. Ya sea en condiciones de calor o un poco más templadas.
Periodicidad de riego:
Una de las preguntas más frecuentes que las personas se cuestionan es ¿qué tanto riego necesita mi planta?, y muchas veces cometemos el error de agregarle exceso de agua, y esta es la razón principal por la que nuestras plantas se pueden llegar a marchitar. En base a esto, tenemos que recordar que la tierra es nuestra mejor guía. Debemos procurar mantenerla húmeda, pero no empapada, y sobre todo no agregarle ningún tipo de barro.
El acondicionamiento térmico del ambiente impacta en la necesidad de agua de las plantas.
En estos casos, es aconsejable humedecer periódicamente las hojas con un rociador muy fino. Esparcir una lluvia delicada sobre la planta le proporcionará bienestar y lucirá más verde y saludable.
Nutrientes:
Todas las plantas necesitan de nutrientes para poder sobrevivir y crecer de manera saludable. Las plantas toman los nutrientes del aire, el suelo y el agua.
Recordemos que la cantidad de nutrientes que se adhieren a nuestra planta depende de varios factores, por ejemplo; tanto la calidad del sustrato como de agua que se le agrega, y por supuesto el tipo de planta que se está cultivando. Es por ello que tenemos que estar en constante observación con nuestras amigas verdes para procurar su efectivo desarrollo.
TIPS EXTRA:
