¿Sabías que un foco común transforma 5% de la energía en luz y 95% en calor,  mientras que los ahorradores transforman 95% en luz y 5% en calor? – Segunda Llamada

Llamadas técnicamente lámparas compactas fluorescentes (CFL, por sus siglas en inglés), son la versión reducida del clásico tubo que todos conocemos o del tradicional bombillo.

Los focos ahorradores fueron creados en 1976, cuando el ingeniero estadounidense Edward Hammer diseñó un modelo en espiral que  se propone para sustituir los focos incandescentes, sin embargo no fue hasta esta década que la gente comenzó a volcar sus vistas a esta alternativa.

Funcionalidad

Tenemos que saber que un foco común transforma 5% de la energía en luz y 95% en calor, mientras que los ahorradores transforman 95% en luz y 5% en calor. Si las matemáticas no nos fallan, esto representa un gran ahorro en nuestro recibo de la luz. Así que si aún no has cambiado los focos de tu casa y/o lugar de trabajo, no esperes más.

Este tipo de focos es de un costo considerable, pero la verdad es que se pagan solos a mediano y largo plazo.

Un dato muy importante que debemos conocer, es que los focos ahorradores o CFL (Compact Fluorescent Ligthbulb) contienen hasta 5mg de mercurio, motivo por el cual no debemos desecharlos en la basura y por el cual hay que tener cuidado si se rompen en el hogar.

La vida útil del foco incandescente es de mil horas, mientras que la del foco de bajo consumo es de 7,500 horas.

Ventajas de los focos ahorradores

  • Los focos ahorradores consuman hasta 80% menos que los incandescentes; y los LEDs hasta en un 85%.
  • Al ser ahorradores de energía, pueden durar de 8 a 10 años, si se utilizan en promedio de 3 a 4 horas al día.
  • Generan 80% menos de calor que los incandescentes, lo que reduce el riesgo de incendio.
  • Al desprender menos calor que los focos normales, es muy bueno para climas calientes y cuartos cerrados.

¿Cómo funcionan?

1. Una corriente alterna llega a la balastra, que controla el flujo de electricidad, y es dirigida hacia los filamentos.

2. Los hilos desprenden calor e ionizan los gases contenidos en le foco.

3. La balastra genera una chispa, con la que se enciende un arco eléctrico entre ambos filamentos.

4. Las hebras al rojo vivo se apagan y se convierten en electrodos para mantener el arco eléctrico y, por consiguiente, la ionización.

5. Los iones chocan con los átomos de mercurio y éstos despiden la luz ultravioleta.

6. Los fotones de ultravioleta chocan con la capa de fósforo que recubre el interior de la lámpara.

7. Los átomos de fósforo emiten luz blanca, visible para el ojo humano.

Momento del cambio

Por ley, en enero del 2014 México dejó de fabricar y comercializar focos incandescentes.

En México ya no es posible fabricar ni comercializar focos de luz incandescente; ya que en 2014 entraron en vigor disposiciones de la Ley para el Aprovechamiento Sustentable de la Energía. Esta medida persigue el logro de distintos beneficios en materia económica, ambiental y social.

Se calcula que, sólo a través de la sustitución de focos incandescentes por lámparas ahorradoras, México logrará una reducción de alrededor del 1.4 por ciento del total de sus emisiones de gases de efecto invernadero.

Fuente: Diversidad Ambiental

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